El período de pandemia que comenzó en el año 2020, para los que nunca habíamos experimentado en nuestras vidas este tipo de evento, en el que nos invitó a los seres humanos a reconocernos de una manera integral en lo emocional, espiritual y corporal como parte del ecosistema, nos permitió hacer conciencia referente al uso de nuestro tiempo en la cotidianidad.
Un tiempo en donde concebimos con exactitud lo que significa la palabra Empatía, ya que, para poder preservar la vida de otro, primero debíamos seguir normativas de bioseguridad como individuo. Etapa que de una manera u otra nos hizo entender el valor del amigo, familia, sociedad y la capacidad de resistencia de nuestro planeta, ante la energía desmedida que desbordábamos diariamente y el nivel de frecuencia que emitíamos a otros (causa-efecto).
Es sorprendente observar la capacidad de resiliencia del ser humano para adaptarse y reprogramarse, en virtud de llevar adelante sus metas de manera exitosa y próspera en estos tiempos, pensando en no perturbar su entorno, asumiendo su responsabilidad en lo ecológico.
Nos comprometimos a crear un espacio para aceptar el cambio por la evolución mental, espiritual y corporal, atreviéndonos a preguntar de manera pública y sin pudores ¿Cómo puedo ayudar?, colocándonos en la posición del otro sin juzgar, siendo más solidarios, honestos, corresponsables llenos de respeto y amor hacia todo lo que nos rodea con un nivel de sensibilidad que nos lleva a reconocer al otro en mí.
Somos diferentes generaciones unidas por un nivel de inteligencia emocionalmente desarrollado, comprometido y conscientes que nos detuvimos un momento a observar para darle valor a nuestras habilidades, virtudes y admitir nuestra misión de vida, entendiendo que para poder fluir ante cualquier cambio en nuestra existencia siempre vamos a necesitar de otro.
Todo lo que se rige por el tiempo se encuentra abierto a cambios constante.
Milagros Ostos García
International Certified Coach
